Allá por julio de 2024 publicamos un artículo recopilatorio de productos de AMVR, entre los que incluíamos su popular facial, un producto que nos parecía ideal para sustituir el incluido de serie con nuestras Meta Quest 3, por una diversidad de cuestiones que os explicamos en ese artículo y en un vídeo en el que mostramos incluso como instalarlo.
Tras unos meses adicionales de uso encontramos algunas cositas que podían mejorarse, y justo entonces descubrimos que el fabricante había lanzado una revisión de su exitoso producto solucionando algunos de sus puntos negros, y haciéndolo más cómodo al uso. ¿Qué tal ha salido la cosa? ¡Ahora lo veremos!
El tiempo de uso, factor clave para valorar un accesorio
La cuestión es que un accesorio de este tipo no se puede probar y dar inmediatamente una valoración final, pues es con el uso con lo que puede comprobarse si aguanta el tipo. En el caso del primer facial que probamos de AMVR he decir que disfruté muchísimo del confort que proporcionaba, pero al cabo de algunos meses adicionales, la espuma del propio facial, combinada quizás con el peso de la correa para la cabeza que utilizaba (que podría ser una cuestión), hicieron que finalmente una parte de plástico del propio facial tocara sobre mi cara, dejándome una pequeña marca en la cara en las sesiones de varias horas de juego.
Un diseño mejorado con materiales más adecuados
Desde finales de noviembre de 2024 que estoy haciendo uso del facial de AMVR renovado, y he decir que se notan los cambios en el diseño. En el vídeo con el que acompañamos este artículo veréis nuestras primeras impresiones y unboxing, así como una conclusión final al cabo de casi 3 meses de uso y decenas de horas de juego.
Lo primero que noté cuando comparé ambos faciales, el modelo antiguo frente al nuevo, fue que la densidad de la espuma había cambiado, algo muy necesario para aguantar el paso del tiempo. Ahora se notaban algo más pesados, unos gramos, pero lo suficiente como para notarlo. De hecho, la espuma en sí no cedía tanto a la presión, sin que esto los hiciera menos cómodos. Esta era una de mis mayores preocupaciones, pues ahora hago uso de una correa para las Meta Quest algo más pesada, una ANNAPRO A3, pero he de decir que el diseño de la misma, de tipo halo, hace que la presión sobre la cara sea mucho menor, por lo que es más complicado que el mismo problema se repita. Y es que el propio facial no solo es «responsable» del confort del usuario con sus Meta Quest 3, por supuesto, sino es algo que traba en conjunto con la correa de sujeción que tengamos instalada.
Manteniendo lo que es bueno
Si te preguntas por qué tienes que cambiar el facial que viene de serie con las Meta Quest 3, que lo cierto es que de por sí es cómodo, es que todavía no has utilizado demasiado tus gafas de Realidad Virtual, o no te ha dado por prestarlas a alguien, o bien no las has usado en épocas calurosas. Como decimos, la solución de serie no es mala, pero sí bastante antihigiénica. La almohadilla que trae de serie es una esponja de sudor en los días calurosos, que con el tiempo podría llegar a oler mal. Además, no es cómoda de retirar ni mucho menos de lavar.
Además de incluir ranuras de ventilación para hacer que las lentes se empañen menos, y que se concentre menos el calor en esa zona (las Meta Quest 3 pueden llegar a calentarse bastante), al igual que el modelo anterior, el nuevo facial de AMVR viene con 2 almohadillas que podrás retirar cuando quieras. Una de ellas es de tacto blandito, de material viscoelástico muy fácil de lavar y de secado muy rápido. La otra viene forrada de piel sintética, uno de mis materiales menos favoritos, pero ampliamente utilizado en todo tipo de accesorios. Tu estrategia, de cara a dejarle tus Meta Quest 3 a alguien, puede ser utilizar una almohadilla exclusivamente para ti, y dejar la otra para invitados.
Por cierto, hablamos en todo momento de la versión de Meta Quest 3, pues es el facial que hemos probado, pero el fabricante también tiene una versión para Meta Quest 3S, que aunque no es igual, cuenta también con la comodidad de las mismas esponjas y la ventilación que no viene con la máscara de serie.
Otros añadidos al nuevo diseño
Tal y como comentamos en las primeras impresiones con el nuevo facial, algunas rejillas de ventilación han cambiado. En AMVR están muy orgullosos del sistema de ventilación de sus faciales, por lo que dudamos mucho que haya sido para peor. La cosa está en que estos meses, los más fríos del año, es bastante complicado comprobar si existe algún cambio, para bien o para mal.
Pero la mejora que más nos ha gustado está en el cambio del sistema de ajuste de la profundidad del facial. Este ajuste sirve para poner la profundidad al gusto del usuario, básicamente sirve para acercar o alejar las lentes de nuestros ojos, algo muy útil si utilizamos gafas, pues así habrá menos posibilidades de que los cristales de las mismas arañen irremediablemente las lentes de las Meta Quest. El sistema anterior era como más fijo y complicado de ajustar, mientras que ahora se han añadido unas perillas que hacen de este ajuste algo muy cómodo.
Por último, uno de los puntos negros del anterior diseño estaba en la pieza de goma que nos aísla un poco de la realidad, tapando la luz que entra por ahí. En el anterior modelo esta pieza costaba de poner y podía caerse con facilidad. Se nota que AMVR ha querido mejorar este aspecto, pues este problema es cosa del pasado.
Por cierto, si utilizáis gafas lo más recomendable es, de hecho, hacerse con unas lentes graduadas de marco magnético, ¡verás (nunca mejor dicho) como es un antes y un después con la Realidad Virtual!
Hemos analizado el facial mejorado de AMVR gracias a una muestra enviada por el fabricante.
Al final del artículo encontraréis enlaces de compra, ¡si usáis el código NextNVR os llevaréis un interesante descuento!

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