Regresamos, una vez más, al Santo Sanctorum de Nintendo Switch: el territorio metroidvania. No en vano, dicho género ha demostrado con el paso de los años sentirse como en casa en la híbrida de los de Kioto. A las ventas multiplataforma nos remitimos. Y sí, aunque suene redundante, Nine Sols es un ejemplo más de ello en todo su esplendor. Pues bien, tras arrasar en su campaña de micromecenazgo y desembarcar en diversas plataformas, el título de Red Candle Games ya se encuentra disponible en la eShop de Nintendo Switch para su compra. Presentándonos una interesante fórmula con desafiantes mecánicas Souls y un corazón 100% plataformero y metroidvania. En definitiva, una propuesta que, no nos engañemos, pinta rematadamente bien. Ya sabemos que el resultado final, al menos en otras plataformas, fue más que notable. No obstante, ¿quieres saber cómo ha resultado el port para la consola de la Gran N? En tal caso te emplazamos a echar un vistazo a nuestra review de cara a descubrirlo de primera mano. Y es que, como suele decirse, ver LEER para creer.
Cuando el trasfondo narrativo lo es todo
Basta encender la consola y comenzar a jugar a Nine Sols para descubrir que nos encontramos ante una propuesta tan magnética como singular. Tirando de hilo narrativo, la aventura nos lleva a encarnar a Yi. Un suerte de héroe improvisado que, tras ser abandonado por su propios compañeros, y por una civilización que oculta demasiados secretos, urde un plan para vengarse. Logrando por el camino conectar congeniar con la especie «humana». Una suerte de «ganado» utilizado a lo Matrix por la estirpe solariana. ¿Nuestro objetivo? Acabar con los 9 Sols, los gobernantes de su decadente y corrupto reino.
La historia en cuestión mezcla elementos propios del taoísmo y la mitología oriental con otros de corte más moderno, tecnológico y cyberpunk. No en vano, sus responsables definen el juego como toda una aventura taopunk. Por si fuera poco, el título otorga un gran valor al componente narrativo. Aportando un toque filosófico y existencial que en muchos momentos de la aventura nos hace replantearnos multitud de cuestiones. Algo no demasiado habitual dentro del género metroidvania. Todo ello aderezado con una acertada construcción de un mundo que, a grandes rasgos, no deja de ser un fiel reflejo de nuestra sociedad. Y sí, la venganza, la tristeza o la ira aquí vuelven a ser los motores tractores.
Corazón metroidvania y plataformero
Puestos en antecedentes, Nine Sols se presenta ante el jugador como un metroidvania de toda la vida con ciertas singularidades. Yi cuenta con los movimientos típicos del género. Algunos ampliables, previo desbloqueo, gracias a un resultón y práctico árbol de habilidades. También disponemos de un sistema de talismanes que logran aportar un amplio, aunque no titánico, abanico de mejoras pasivas. Recargables, todas ellas, en función del daño infringido o el timing de nuestros bloqueos defensivos. De igual forma, durante la aventura contamos con «tiendas» donde adquirir determinados objetos. Algo que, pese a no encontrarnos ante la propuesta más profunda del género, aporta algo más de variedad al conjunto.
El juego nos presenta un extenso mapa con puntos de teletransporte (se echa en falta alguno más), zonas de plataformas y una base de operaciones donde interaccionar con otros personajes y mejorar nuestro equipo. Por desgracia, el mundo de Yi resulta algo confuso. Sí, te vas a perder en más de una ocasión. La interconexión entre zonas tampoco funciona todo lo bien que debiera. Se echa en falta un sistema de señalización con el que aportar mayor fluidez a la propuesta de Red Candle Games. ¿Duración? Entre los desafiantes jefes, los secretos por descubrir y la exploración pura y dura la aventura nos puede llevar unas 20 horas. Ni tan mal. Por cierto, ¿se os atranca la aventura? El juego cuenta con dos modos de dificultad.
Una propuesta de lo más combativa
Si hay un aspecto donde Nine Sols logré alcanzar la excelencia ese es su sistema de combate. Por un lado, contamos con una intuitiva mecánica basada en parrys y su consiguiente timing. Estructurando dichos combates en torno a un exigente, intuitivo y gratificante sistema de desvío de ataques y contraataques a lo Sekiro, pero en 2D. Algo que, pese a no encontrarnos con la profundidad vista en otros títulos como Hollow Knight, aporta dinamismo, fluidez y una constante sensación de satisfacción. Y es que, pese al grado de exigencia, las batallas no se sienten demasiado injustas con el jugador.
Es cierto que el juego cuenta con instantes plataformeros en los que sacar partido a todas nuestras habilidades. No obstante, la acción es uno de los principales protagonistas del juego. Más aún en un mundo (mapa) en ocasiones no demasiado cohesionado. Lo que está claro es que ese componente enfocado al combate se acentúa con la presencia de espectaculares y desafiantes jefes. Poniendo a prueba nuestra precisión y dominio de las habilidades aprendidas. Sin lugar a dudas, dichos enfrentamientos son el magna cum laude de la aventura.
Arte en armonía y movimiento
El apartado artístico es otro de los puntos fuertes de Nine Sols. Por un lado, y hablamos de lo visual, los modelados de personajes y entornos y las animaciones hechas a mano (2D) aportan frescura y resultan realmente vistosas y detalladas. El mino con el que se ha dado aquí cada pincelada es más que palpable a simple ojo de buen cubero. Por el otro, los espectaculares entornos con elementos en 2.5D a medio camino entre lo ciberpunk y el taoísmo más tradicional ponen la guinda al pastel. Eso sí, debemos recalcar que esa mezcla moderno-tradicional y los toques de anime y manga pueden resultar algo chocantes. Como si se hubieran juntado piezas de diferentes puzles en un mismo collage.
En términos sonoros la sensación vuelve a ser extraña. No nos malinterpretéis, la BSO es una maravilla. Y es que el estilo musical combina instrumentos asiáticos de corte tradicional y acompañamientos vocales propios de la lírica china con toques electrónicos y sintéticos. No obstante, en ocasiones no terminamos de encajar algunas piezas demasiado dispares entre sí. Eso sí, la factura… ¡impecable! En términos técnicos y de rendimiento, el juego se desempeña bien tanto en el dock como en modo portátil. Luciendo especialmente bien en la pantalla OLED. Aunque si que hemos sufrido algunas ralentizaciones en zonas concretas. No se trata de zonas con demasiada carga. Por lo que se trata de situaciones recurrentes en determinados puntos específicos. Así que suponemos que será un asunto a enmendar en próximas actualizaciones.
Nine Sols – Un desafiante e impactante metroidvania
Nine Sols se erige, desde el minuto uno de juego, como un metroidvania de la cabeza a los pies. Una original propuesta que apuesta por una fuerte carga narrativa, un particular diseño artístico y, sobre todo, un espectacular sistema de combate de corte defensivo basado en parrys.
Es cierto que el mapa en ocasiones no resulta demasiado cohesionado y que la combinación de elementos tradicionales y modernos no siempre termina de encajar. No obstante, si te gusta el género metroidvania/souls-like en 2D y buscas una narrativa rica en matices y un exigente y desafiante sistema de combate este es tu juego.
Hemos analizado Nine Sols gracias a un código digital cedido por Red Candle Games. Versión analizada: 1.1
Debe estar conectado para enviar un comentario.