Aunque a día de hoy habrá muchos jugadores que no le conozcan, Yū Suzuki es una figura de máxima importancia en la historia de los videojuegos. El veterano desarrollador es el autor de algunos de los videojuegos más relevantes de la época arcade, como Out Run o Virtua Fighter, además de la emblemática saga Shenmue, que tuvo su última entrega en 2019. A pesar de que los tiempos de reunirse a jugar a las máquinas en una sala de recreativas haya quedado atrás, el creador sigue muy activo y buscando nuevas ideas, y no ha abandonado del todo la jugabilidad de aquella época. Es gracias a él que ha llegado a nuestras manos Air Twister, el título que protagoniza nuestro análisis de hoy.
Aunque nos quedamos con las ganas de ver Shenmue III en nuestras Nintendo Switch, el veterano e icónico autor no ha esquivado esta vez a la consola híbrida con su nuevo título. Un título que, a simple vista, puede parecer un simple shooter sobre raíles, pero que bajo su jugabilidad aparentemente clásica y simple esconde una dosis bastante generosa de sorpresas. ¿Quieres conocer el resultado de la última obra de uno de los reyes del arcade junto con el estudio YS NET, y que nos llega en formato físico gracias a Meridiem Games? Prepara tu ballesta, es la hora de defender un planeta de una terrible invasión.
La amenaza de los Needles
«A la salida de un Agujero Blanco, los espacios extradimensionales llamados AIR brotan en forma de burbujas. La Burbuja Reina, una gigantesca burbuja que encapsulaba y protegía los AIR, estalló con la fulgurante aparición de los Needles. Con su refugio perdido, los Needles erosionaron los AIR hasta el borde de la extinción. Arch, descendiente de la familia real que antaño protegía los AIR, confía en la leyenda sabiendo que debe levantar sola el estandarte de la resistencia contra los Needles. Cuenta la leyenda que cuando la Burbuja Reina se pierda, si la Familia Real ejerce legítimamente los poderes del Air Twister, junto con el poder de restaurar a los Cuatro Guardianes Reales, la Burbuja Reina se regenerará y volverá a dar vida a los AIR.»
Este párrafo es el inicio de la historia de este título que, eso sí, no nos presenta su argumento de una manera tan explícita. Mientras jugamos, la narrativa es principalmente visual, comenzando con una larga cinemática que muestra dicha invasión y la llamada a las armas de Arch, nuestra protagonista. Nos esperan hordas de Needles por el camino, y los enfrentamos flotando a través de los variopintos parajes de su planeta, con la «ayuda» ocasional de criaturas voladoras y con fieros jefes esperándonos al final de cada nivel.
Moverse y disparar, la esencia arcade de Air Twister
En su esencia más básica, la jugabilidad de Air Twister es puramente arcade. Se trata de un shooter sobre raíles en el que vamos avanzando frontalmente mientras van apareciendo oleadas de enemigos en pantalla. Podemos disparar en ráfaga pulsando el botón repetidas veces, o podemos movernos para fijar varios blancos simultáneamente, y después pulsar el botón para lanzar varios disparos teledirigidos a la vez. Al completar el recorrido de cada uno de los 9 niveles (hay 11, pero 2 son de bonificación) aparece el jefe, que nos propone un enfrentamiento algo más complejo.
A priori, y en una primera toma de contacto, el título parece acorde con los estándares de su género, sin muchas más pretensiones. Una aventura que, si se completa a la primera, puede durar a lo sumo unos 35-40 minutos, haciéndolo sumamente breve. Pero esto es sólo en apariencia. Porque la realidad es que no es tan sencillo acabar el recorrido en el primer intento… Y que, lo consigamos o no, el título nos guarda un buen puñado de sorpresas que le dan unas cuantas capas más de profundidad, llevándolo varios escalones (y unas cuantas horas de juego) más allá.
Lo que nos espera tras nuestra primera partida
Al acabar, con o sin éxito, nuestro primer intento de completar la historia de Air Twister, se abre un amplio abanico de opciones. La más importante de ellas es el Mapa de aventuras. En él, podemos invertir las estrellas que ganamos en la partida para comprar diversas mejoras: aumentos de vitalidad, accesorios que sirven de escudo, armas nuevas, cosméticos para personalizar el aspecto de Arch, e incluso nuevos modos de juego. Pero no sólo eso: es aquí, en el Mapa de aventuras, donde podemos conocer de verdad la historia del título.
Entre las cosas que podemos comprar en el Mapa de aventuras, se encuentran los fragmentos de la historia del juego, descripciones detalladas de nuestros aliados y enemigos, información sobre los distintos biomas que visitamos, y varios elementos adicionales que añaden más chicha al lore del juego. Además, podemos desbloquear cinemáticas y composiciones pertenecientes a la banda sonora, para volver a escucharlas. Y ojo a este último detalle, al que volveremos más adelante: la banda sonora tiene un papel fundamental en la experiencia de juego.
Si no triunfas, mejora y vuelve a intentarlo
Las mejoras que obtenemos en el Mapa de aventuras nos sirven para afrontar el desafío de la historia principal con más garantías. A lo largo de nuestro recorrido, nos encontramos con distintos tipos de enemigos, cada uno con sus peculiaridades. Algunos de ellos se pasean por la pantalla sin más, siendo totalmente inofensivos; otros aparecen en grupo y atacan de un modo concreto, ya sea con disparos simples o lanzándose hacia nosotros; otros son invulnerables hasta que adoptan una posición concreta. Esto, unido a los distintos obstáculos y barreras físicas que encontramos al avanzar por los niveles, enriquece la experiencia de juego y la hace muy dinámica.
Caso aparte son los ya mencionados jefes de cada nivel. Son, obviamente, huesos más duros de roer, a los que hay que disparar en puntos concretos de su cuerpo, y con los que hay que prestar atención especialmente al aspecto defensivo. Con patrones de ataque definidos y no siempre predecibles, es importante comprender cómo preparan su disparo para esquivarlo correctamente. Y es que esos ataques pueden llegar a hacernos mucha pupa y matarnos en menos que canta un gallo. Las recompensas obtenidas al jugar varias partidas nos ayudan a resistir más en estas dinámicas peleas contra, dicho sea de paso, rivales con un diseño artístico y jugable muy satisfactorio.
Más allá de la historia de Air Twister
Si los desafíos del modo historia y los alicientes del Mapa de aventuras no parecen suficiente, Air Twister aún tiene más que ofrecernos. Contamos con varios modos de juego adicionales. El modo Polvo de estrellas nos enfrenta a oleadas de enemigos, cada vez más rápidos y esquivos, en una lucha contra el tiempo. Cada vez que acabamos un nivel, ganamos segundos extra para el crono, y perdemos cuando se nos acaba el tiempo. El modo Arcade nos lleva al recorrido del modo historia, pero con varios niveles de dificultad disponibles y ajustes predeterminados. La Fiebre de Jefes nos presenta hasta cuatro desafíos de tipo boss rush.
Existen, además, otros modos de juego que nos sacan de la jugabilidad habitual, siendo más similares a un minijuego que otra cosa. Uno de ellos es el modo ligero, que homenajea a los clásicos arcade de avance lateral en 2D, y que consiste en recolectar el mayor número de estrellas posible sin que los enemigos nos golpeen, y otro de ellos es el Rompebloques, un minijuego de velocidad que consiste en golpear bloques numerados de menor a mayor en el menor tiempo posible. Por desgracia, para acceder a alguno de estos minijuegos es necesario usar tickets, y aunque se obtienen cumpliendo misiones en el juego, resulta algo molesto no poder acceder libremente.
Una puesta en escena gloriosa
Si bien el estilo gráfico de Air Twister es digno de mención, con un gran diseño de escenarios y de enemigos y un amplio abanico de personalización para nuestro personaje, donde realmente sorprende su puesta en escena es en el aspecto musical. Su banda sonora, obra del compositor holandés Valensia, es de estilo ópera rock. ¿Qué es eso? Piensa en Bohemian Rhapsody de Queen, e imagina que ese estilo musical esté presente en todo momento mientras juegas. Es de esos títulos que vas a querer jugar con auriculares puestos, por más que en una primera toma de contacto parezca que no encaja demasiado con la jugabilidad. No es así. Es una delicia jugar con semejantes composiciones sonando de fondo.
En el aspecto técnico, la llegada de este título a Nintendo Switch aprovecha de forma bastante satisfactoria una de las opciones que ofrece la híbrida, que es la de utilizar la pantalla táctil. En el modo portátil de la consola, podemos valernos de la propia pantalla para controlar al personaje y disparar. Si bien es una opción que no nos ha parecido preferente en nuestro análisis, es algo personal, y no cabe duda de que los jugadores que estén acostumbrados a este tipo de control podrán encontrarlo como una opción muy interesante, ya que su implementación funciona bastante bien. En general, en lo técnico, el juego sólo tiene un detalle a revisar: ciertos textos que se han quedado sin traducir del inglés en la partida y en los menús de logros.
Air Twister – Nintendo Switch. Apunta, dispara, falla, repite
Lo que, en su núcleo más puro, es una experiencia arcade totalmente estándar, se convierte en algo distinto gracias a su manera de presentar el sistema de progresión, los detalles narrativos y los modos de juego adicionales. Todo ello, aderezado con un apartado visual muy resultón y con una banda sonora de las que da gusto oír. Air Twister incluye todo lo que promete su nombre: giros que nos esperan al final de nuestro primer recorrido, y aire fresco a un género que sigue demostrando que aún le quedan cosas por descubrir. El mítico Yū Suzuki no defrauda.
Hemos analizado Air Twister gracias a un código digital proporcionado por Meridiem Games. Versión analizada: 1.0.0
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