[GUÍA] Cómo conseguir la Armadura del Espíritu Maligno en Zelda: Tears of the Kingdom

The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom ha arrasado con todo desde su estreno. Tampoco es que sea de extrañar: los análisis coinciden en que es una obra maestra, y algunos medios hablan del mejor videojuego de la historia. En NextN queremos ayudar a los jugadores a descubrir todos los misterios que encierra TOTK, y en esta ocasión nos centraremos en las armaduras y los distintos atuendos que podemos encontrar escondidos por Hyrule. En este artículo en concreto, os enseñaremos cómo conseguir la armadura del espíritu maligno.

 

Este conjunto está compuesto de 3 partes: cota, botas y casco. Por separado, todas ellas tienen la habilidad de aumentar el sigilo, pero cuando vestimos la armadura completa, además, desbloqueamos otras dos habilidades. Se trata de Camuflaje, que hará más difícil que los enemigos nos detecten incluso cuando estemos cerca de ellos, y Armas óseas +, que potencia el ataque de las armas de hueso.

 

Botas del Espíritu Maligno en Zelda: Tears of the Kingdom

Las botas del espíritu maligno se consiguen como premio por completar una misión secundaria, la profecía de Lomei Norte. Para activar esta misión, debemos encontrar el Santuario de Maia’otaq, situado en el centro de la Fortaleza de Lomei Norte, uno de los 3 laberintos que encontraremos en el Hyrule de Zelda: Tears of the Kingdom. Encontrarás esta fortaleza al noreste de la Gran Estepa de Tabanta.

 

 

Frente al santuario hay un anillo de dragón zonnan de piedra: actívalo con tu brazo derecho y activarás la misión. El siguiente paso será acudir al laberinto que hay en el cielo, justo encima de dónde estamos. También habrá una parte que se desarrolla en el subsuelo. Ten en cuenta que, si de algún modo llegas antes a los laberintos del cielo o el subsuelo, no podrás acceder a ellos hasta activar el anillo de la fortaleza de la superficie. Desde el Archipiélago de Hebra este te debería ser fácil llegar, te recomendamos completar el Santuario de Tanin’ou para que te sirva de punto de teletransporte por si te caes. Hay varias plataformas flotantes con ventiladores que facilitan la tarea, pero con los artilugios zonnan podrás elegir tu propia estrategia para llegar al laberinto del cielo.

 

Una vez allí, encontraremos lo mismo que en la superficie: un santuario y un anillo. Como siempre, te recomendamos activar el santuario (en este caso, se trata del de Teneb’esai) como punto de control, pero lo importante para continuar es activar el anillo. Al hacerlo, aparecerán 4 marcadores en el laberinto. Tienes que encontrarlos siguiendo los caminos azules del minimapa. Una vez consigas los 4, aparecerá un interruptor en lo alto del laberinto. Salta desde ese lugar, sin miedo, y llegarás al laberinto del subsuelo (pasando por el abismo de la fortaleza de Lomei norte, que estaba bloqueado al pasar por la superficie). Allí hay un enemigo, se trata de un gólem cúbico supremo. Derrótalo, activa el anillo de dragón del subsuelo y ya estaría. El cofre que consigas contiene las botas del espíritu maligno. En la Fortaleza de Lomei norte: subsuelo está la raíz de Qato’aiam. Aprovecha para conseguirla.

 

Cota del Espíritu Maligno

La cota del espíritu maligno se consigue como premio por completar la profecía de la isla Lomei. Para activar esta misión, debemos dirigirnos a la fortaleza de la isla Lomei, al noreste de la región de Akkala. Puedes usar la estrategia que creas más conveniente, pero te recomendamos entrar en la fortaleza por la Cueva de la playa de Akkala Norte, que queda bastante cerca del santuario de Rasi’uaq. Encontrarás la cueva al sur, en la ladera de la montaña. Una vez en el laberinto, entra en el santuario de Ig’asuq y activa el anillo de dragón, que te dará acceso a la fortaleza de Lomei: Cielo.

 

 

A partir de aquí, el funcionamiento de la misión es parecido a lo visto para conseguir las botas. Alcanzar el laberinto celestial es algo más complicado en este caso. Puedes probar desde la atalaya del monte Ulri o desde la Isla de la cantera, que se encuentra justo sobre la Península Espiralia, en la superficie. Elijas el punto de partida que elijas, ten en cuenta que puedes hacer escala para recuperar vigor en las solitarias islas del Archipiélago de Akkala Norte, donde encontrarás además algunos artilugios zonnan que te ayudarán a alcanzar tu objetivo.

 

Cuando llegues a la fortaleza de Lomei cielo, activa el santuario de Mogisar y el anillo de dragón. De nuevo, esto hará aparecer 4 marcadores: búscalos e interactúa con ellos para que aparezca el terminal de lo alto de la fortaleza. Salta al vacío desde ahí para llegar al subsuelo de la isla Lomei. Otra vez tendrás que enfrentarte a un gólem cúbico supremo. Derrótalo, activa el anillo de dragón, y abre el cofre: en su interior, encontrarás la cota del espíritu maligno. No olvides, ya que estás aquí, visitar la Raíz de Qusa’gi.

 

Casco del Espíritu Maligno

El casco del espíritu maligno es la última prenda del conjunto. Se consigue tras completar La profecía de Lomei Sur. La misión comienza activando el anillo de dragón de la Fortaleza de Lomei sur, entre el desierto de Gerudo y la Cordillera de Gerudo este, inmediatamente al oeste del Monte Berill. El anillo de dragón está frente al santuario de Mosutis.

 

 

Una vez hecho esto, viaja al laberinto del cielo desde la Atalaya del cañón de Gerudo o desde el Archipiélago de Farone o de Gerudo este. Sea como sea, vas a necesitas artilugios resistentes que vuelen durante un buen rato. Gana la máxima altitud que puedas y, si se rompen, déjate caer planeando. En la entrada de la fortaleza del cielo encontrarás el santuario de Siamo’susi y otro anillo dragón que al activarlo hará aparecer 4 marcadores. El recorrido para encontrarlos sigue los caminos azules, como en los anteriores, aunque en este laberinto concreto habrás de usar infiltración en alguna ocasión. Una vez conseguidos todos déjate elevar o trepa hasta la azotea, interactúa con el terminal, y salta hacia el subsuelo.

 

Allí te espera otro gólem cúbico supremo, otro anillo de dragón y, tras activarlo, otro cofre. Este último contiene el casco del espíritu maligno y, con él, habrás completado la armadura. También estará cerca de ti la raíz de Situsom, aprovecha para conseguirla. Esta armadura no se puede mejorar en las fuentes de las grandes hadas, pero con ella te pasarás Zelda: Tears of the Kingdom yendo bien facherito.

 

 

Huelga decir que puedes conseguir las prendas en cualquier orden. Sin embargo, los laberintos de cada misión sí debes resolverlos por este orden: superficie – cielo – subsuelo. Esperamos que esta guía te haya sido útil. Si así ha sido, compártela, háblale de ella a tus colegas, o deja un comentario por aquí abajo. Seguiremos actualizando nuestras guías sobre The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, así que permanece atento a los artículos y a las redes sociales de NextN.