Haven

Análisis Haven – Nintendo Switch. ¡Love is in the game!

Haven
Fecha de lanzamiento
4 febrero, 2021
Número de jugadores
1-2 (cooperativo)
Idiomas
Español, inglés, alemán, etc.
Tamaño de la Descarga
3102,00 MB
Nuestra puntuación
85

Hay quien sostiene, sin ser ningún tipo de negacionista emocional, que a estas alturas de la vida ya pocas cosas pueden realmente sorprendernos. Y los videojuegos, como fiel reflejo de la sociedad que son, no son una excepción. No obstante, ¿qué pasaría si se nos presentara una aventura con todos los elementos propios y habituales vistos en el mundo de los videojuegos (RPG, acción, exploración, aventura, simulación…), pero con el suficiente valor para dejarlos en un segundo plano frente a un sentimiento tan puro y verdadero como es el AMOR? En definitiva, ¿qué sería de un servidor sin su jugadora y compañera de partida? En The Game Bakers son más que conscientes de todo lo anterior, y por ello nos traen a Nintendo Switch Haven… una experiencia cooperativa, sobre el amor y la libertad, que aspira a conquistar nuestros corazones. ¿Logrará conseguirlo?

PDD: No te pierdas nuestro análisis (en pareja) para poder descubrirlo.

 

¿El amor puede realmente con todo?

Nos ha tocado vivir tiempos difíciles. Pandemia, crisis económica, ruptura social, guerras, terremotos… No obstante, el ser humano siempre se ha caracterizado, a pesar de parecer en muchas ocasiones lo contrario, por ser un animal eminentemente social. Y probablemente sea ese rasgo diferenciador el que aporte un plus adicional al valor de la pareja. Sentirnos elegidos y amados es, sin lugar a dudas, un asunto nuclear para el ser humano. Por todo ello, que mejor forma de afrontar esta experiencia cooperativa que junto a mi pareja. A fin de cuentas, muchas de las decisiones tomadas durante la aventura son, en esencia, muy similares a las que debemos superar en nuestro día a día. ¿Lista, Inma?

– ¡Nací lista!
(¿Para qué preguntaría?)

Una vez puesto el traje de faena, Haven nos invita a encarnar a Yu y Kay, una pareja que lo abandona todo, infringiendo las propias normas que los rigen, para escapar a un recóndito planeta en el que poder vivir juntos… ¡en libertad! Y es aquí, precisamente, donde nos damos cuenta por primera vez de que nos encontramos ante una experiencia pocas veces vista en el mundo de los videojuegos. ¿Escaparías a un futuro incierto por mi? Esta pregunta retumba sin parar en nuestras cabezas mientras transcurren, de una forma bastante mágica y poética, los primeros compases de juego. Por suerte, basta una mirada/sonrisa de complicidad para obtener, sin cruzar palabra alguna, la respuesta.

 

Haven

 

Dos amantes que lo dejan todo atrás, escapando de una sociedad donde su relación no tiene cabida, para hacer posible su historia de amor. A primera vista, puede parecer un simple cliché narrativo, una escusa para que Haven nos presente su hilo argumental o un mero cascarón cosmético para sus distintas mecánicas. Nada más lejos de la realidad. Comenzamos la aventura en nuestro nido (nunca mejor dicho)… de amor. Dicho cubículo ejerce las veces de centro neurálgico y no es otra cosa que la nave en la que nuestros protagonistas aterrizaron manualmente, tras desactivar todos los sistemas de seguimiento.

– Pues la verdad es que el trabajo que ha hecho Yu aquí ha sido increíble (indica Inma con una sonrisa de oreja).

– Lo mismo Kay, aventurado de mi, también ha tenido algo que ver (le susurro yo en tono jovial al oído).

Y es que Inma tiene toda la razón. Contamos con zona de aseo (para curarnos y ducharnos), cocina para elaborar alimentos (al más puro estilo caldero de Breath of the Wild), sala de estar para sentarnos a charlar, dormitorio para descansar y lo que se tercie y algunas otras actividades que, al no venir de serie, tampoco vamos a destriparos. A pesar de las comodidades del «hogar», tras quedarnos sin energía eléctrica nos vemos obligados a salir en busca de flujo. Una suerte de corrientes de energía que debemos seguir mientras nos deslizamos por un extraño planeta hecho pedazos y compuesto por diversos islotes flotantes. Tras recolectar los materiales la noche da paso a una relajada charla en la que en función de nuestras respuestas vamos, o no, ganando diferentes atributos.

 

El trabajo en equipo incluye hasta las tareas más cotidianas de nuestro nuevo hogar

 

– No atosigues a la pobre chica, que bastante tiene ya encima (me indica Inma con tono algo triste… parece que el proceso de empatía con los personajes va a ser bastante rápido).

Y efectivamente, en ocasiones dichos atributos se ganan a costa de incomodar a nuestra querido conviviente. Al día siguiente decidimos (bueno, más bien uno de los dos) salir a recolectar flujo y/o alimentos. Por desgracia, un gran terremoto sacude los cimientos del islote, dañando por el camino nuestra propia nave. A partir de aquí… no nos queda otra que sacar arrestos de donde no los hay para luchar por nuestra supervivencia. Limpiando, ya de paso, el planeta y su flora y fauna de un viscoso material llamado Oxido.

 

El secreto de la felicidad… ¡el trabajo en equipo!

Si hubiera que dar una definición de pareja, se podría decir que se trata de una relación entre dos personas que se caracteriza por la profundidad de su duración, intensidad y exclusividad. Y nuestra tarea aquí pasa, precisamente, por explorar dicha profundidad a la par que hacemos lo propio en el exterior en busca de materiales para ir reparando nuestro nido. Todo ello mientras desentrañamos los secretos de tan majestuoso entorno. Por suerte, Haven cuenta con un sistema de control bastante simple e intuitivo. Podemos caminar (a velocidad de tortuga), deslizarnos con una suerte de propulsores, derrapar (al más puro estilo de Mario Kart) e incluso virar sobre nuestros propios pasos. Movimientos esenciales para poder llevar a buen puerto las secciones propias de cualquier título de supervivencia. Véase explorar en busca de recursos y alimentos para cocinar posteriormente. Búsqueda que, dicho sea de paso, se aleja de la complejidad ofrecida por alguno de los exponentes del género, como es el caso del excelso Lost in Blue. Y es que, como ya hemos comentado al principio, lo realmente importante aquí, el verdadero núcleo jugable, reside en la propia pareja protagonista y como decidimos fortalecer, o no, dicha relación. Para facilitar, aún más las cosas, contamos con zonas intermedias de acampada y formas (bastantes peculiares) de realizar viajes rápidos entre diferentes territorios.

 

Haven nos permite jugar en solitario (pudiendo cambiar de personaje en cualquier momento con tan solo presionar un botón). No obstante, y para ser honestos, es trabajando codo con codo (cooperativo local) como se le saca todo el jugo a esta peculiar experiencia. Y es que su ritmo pausado hace que todo sea mucho más ameno y divertido en compañía (discusiones de pareja incluidas) Y OJO, esto no es un defecto perse. Ya que, precisamente, la finalidad de este título es poder jugarlo, de principio a fin, acompañado. En relación a su vertiente «survival», conviene recalcar, sobretodo para los que se alejan a zancadas de un género en ocasiones bastante exigente, que su grado de complejidad se encuentra a años luz de lo visto en la mayoría de juegos versados en dicha temática. Es más, si, por poner un ejemplo, decidimos no comer (nosotros lo hemos hecho. No sin antes generar un gran revuelo en el seno de la pareja), solo afecta a algunas de las acciones que podemos realizar durante el combate.

 

 

La recolección de objetos para reparar nuestra nave es de vital importancia

 

Y hablando de combate… Es cierto que, más allá de las secciones narrativas de las que hablaremos más adelante, nuestra tarea principal pasa por explorar y recolectar recursos mientras disfrutamos de un entorno (visual y sonoro) realmente espectacular. No obstante, no faltan aquí las batallas contra temibles monstruos. Y en ellas, una vez más, el trabajo en equipo resulta fundamental. Enfrentamientos que, pese a no ser demasiado profundos, complejos ni variados (el surtido de especímenes a los que enfrentarnos es bastante limitado) y encontrarse a medio camino entre las batallas en tiempo real y los combates por turnos, resultan entretenidos. Conseguir que ambos personajes logren sincronizarse para lanzar un ataque en equipo, combinar formaciones defensivas y ofensivas, socorrer a nuestro compañero caído o simplemente liberar a la fauna local corrompida (que posteriormente podemos tener como mascotas) son elementos ya de por si satisfactorios por separado.

 

Por si fuera poco, son diversos los elementos que debemos recolectar. Ya se trate de ingredientes para cocina o materiales de reparación. Tampoco es que Haven destaque por la variedad ni el frenetismo, pero siempre tenemos algo que hacer. Y, como no podía ser de otra forma, todas las acciones grupales aumentan nuestra barra de sincronía y compenetración, pudiendo desbloquear nuevas habilidades o aumentar atributos como la salud o el ataque.

 

 

 

El poder de una buena narrativa

Como ya hemos comentado unas líneas más atrás, el ritmo pausado de Haven puede acabar desembocando en un torrente de monotonía. Sobretodo si decidimos afrontar esta aventura en solitario y con prisas. No obstante, si decidís vivir esta bonita historia en compañía de vuestra media naranja mielaza, disfrutaréis incluso de los momentos más íntimos y sosegados. Ya sea charlando en el sofá de la «sala de estar», discutiendo sobre quien es el que acaba siempre con el agua caliente en el baño o disfrutando los placeres carnales de la vida (que nadie se escandalice, somos pareja para lo malo, para lo bueno y… ¡para lo PEGI18!).

– ¿Agua caliente? Ese eres tú y tú y nada más que tú (esboza Inma mientras tararea la letra entre carcajada y carcajada).

– Para, para, para. ¿Por qué, en estos momentos de sofá y manta, parecemos 4 en lugar de dos? (pregunto a Inma con el rostro de sorpresa propio de quien acaba de descubrir el secreto de la felicidad).

Y es que esa es otra, cada palabra, expresión y línea conversacional está perfectamente encuadrada dentro de lo que cualquier pareja podría vivir en su quehacer diario. Algo que nos lleva a empatizar con sus dos protagonistas a las primeras de cambio. Os sorprendería saber la de veces que Inma y yo hemos acabado tratando algún tema de pareja abordado previamente en el juego por Yu y Kay. En este aspecto, la labor del equipo de guionistas ha sido realmente brutal. Por si no fuera suficiente, la aventura nos obliga a tomar ciertas decisiones que tienen su importancia/influencia directa en la evolución de nuestra propia relación. Algo heredado, sin ningún tipo de duda, de las novelas visuales.

 

 

Muchos os preguntaréis, con semejante coctel de mecánicas… ¿cómo funciona su cooperativo? La verdad es que, mucho mejor de lo esperado. El sistema de cooperación nos lleva a fomentar el trabajo conjunto en casi todas sus vertientes jugables. En el exterior, cualquiera puede tomar la responsabilidad de deslizarse por los pastos planetarios mientras el otro «caza» alimentos. Y si en el exterior un jugador se encarga de deslizarse y el otro de recolectar recursos, las batallas nos obligan a sincronizarnos y combinar ataque y defensa para salir airosos. ¿La cocina?, a nuestra elección queda (a nosotros la elaboración de turnos nos facilita mucho el trabajo) decidir quien va a ser el encargado de preparar la comida en cada momento. Por otro lado, a vueltas con la fuerza de su narrativa, decidimos que cada uno tomara las decisiones correspondientes a su respectivos alter egos jugables, ¡como en la vida misma!

 

Una oda a la belleza

Llegamos a uno de los puntos fuertes de Haven. Es posible que muchos piensen que nos encontramos ante un título que trata de tocar muchos palos sin profundizar, realmente, en ninguno. Y hasta cierto punto esto es así. No obstante, existen dos pilares sobre los que se sustenta este juego. La narrativa (anteriormente mencionada) y su apartado artístico. En relación al segundo, tanto la escena de vídeo introductoria, como los diseños de los personajes o incluso los escenarios que nos rodean son tratados con una gran delicadeza y respeto. Todo ello aderezado con un estilo que mezcla el anime (novela visual) con el modelado 3D y el cel shading (aventura y exploración).

 

Haven

 

Y no, no nos encontramos ante ningún AAA. Las limitaciones técnicas están más que presentes y muchos de los elementos que aparecen en pantalla son reciclados, desembocando en escenarios bastante repetitivos. A pesar de todo, la belleza y majestuosidad del mundo que nos rodea es tan real y sincera como el amor que se profesan Kay y yu. Para rematar, y entrando en terreno sonoro, el artista de origen francés conocido como DANGER nos trae una BSO que enamora desde el minuto uno de juego (y de eso se trataba, ¿verdad?) con melodías de marcado corte electrónico, pero pausado, y momentos realmente memorables. El  juego nos llega con textos en perfecto castellano (con una más que correcta labor de localización y adaptación a nuestro idioma) y voces en inglés. Destacando la soberbia actuación de doblaje de Janine Harouni y Chris Lew Kum Hoi. En serio, de corazón os decimos que merece la pena pararse a escuchar hasta el último suspiro, chascarrillo o cambio de entonación. La labor de representación emocional de ambos actores es genial.

 

En términos de rendimiento, Haven se comporta, amén de algún que otro tirón puntual, de una forma correcta y fluida tanto en modo dock como con la Nintendo Switch en la mano. Eso sí, la pérdida de nitidez de los modelados 3D de los protagonistas suele acrecentarse en modo portátil. Por otro lado, los tiempos de carga existentes entre las distintas zonas disponibles en el juego, sin ser demasiado largos, si que logran pausar un poco el transcurso de la aventura. Más aún si tenemos en cuenta que los distintos niveles no suelen ser demasiado distantes. En el reverso de la moneda, dichos parones nos brindan hermosas ilustraciones con nuestros protagonistas realizando tareas tan entrañables como cotidianas. Para concluir este apartado, mencionar que hemos sufrido varios bugs, durante las más de 13 horas que nos ha durado el título, obligándonos a tener que comenzar de nuevo parte del trabajo realizado. Por las comprobaciones que hemos podido realizar…

– ¿Hemos? – pregunta Inma

… que Inma ha podido realizar, la mayoría de los cuelgues parecen surgir a los pocos minutos de haber recuperado el sistema de un largo periodo de suspensión.

 

 

Haven – Amor híbrido.

Vamos a ser claros en nuestras conclusiones. Haven no es un título libre de defectos y tampoco se escapa del San Benito de la repetitividad (sobre todo si decides afrontarlo en solitario) ni de ser tildado de excesivamente pausado. No obstante, nos encontramos ante una propuesta única, que logra conjugar de forma más que correcta un maravilloso hilo narrativo, un gran apartado audiovisual, toques de RPG y de survival y una pizca de novela visual. ¿Por qué es único? Sencillo, la aventura que aquí se nos brinda no se centra en derrotar a ningún villano ni en liberar al planeta. Todo aquí es mucho más simple, o complejo… Ayudar a Yu y Kay a permanecer juntos. El hilo narrativo y jugable es un mero pretexto para presentarnos toda una historia de amor. Y no una cualquiera, una de carne y hueso en donde lo cotidiano se conjuga con la utopía espacial. Logrando, al menos en nuestro caso, empatizar con muchas de las situaciones vividas durante la aventura. Sintetizando, el título perfecto para compartir este San Valentín.

 

Para finalizar, y dado que en este análisis hemos participado dos personas, nos ha parecido correcto dejaros nuestras sensaciones individuales a modo de conclusión final:

Inma: reconozco no ser una jugadora demasiado habitual. Además, suelo alejarme de aquellos juegos demasiado extensos o «complejos». Quizás, en parte, sea por lo que Haven ha conseguido engancharme tanto. Yu, Kay y su maravillosa historia de amor (real, cotidiana y no tanto de cuento de hadas) perdurará mucho tiempo en mi nuestra memoria.

Synbi: Haven nos sirve en bandeja una propuesta que no profundiza demasiado en ninguno de los palos que toca, pero que nos ofrece una experiencia que, tanto narrativa como artística y jugablemente hablando, logra dejar huella-s x2. Amor y videojuegos, ¡el binomio perfecto!

 

Haven

Hemos analizado Haven gracias a un código digital cedido por The Game Bakers. Versión analizada: 1.0.185.

Haven
Amor híbrido
Haven es una de esas propuestas difíciles de encasillar. Una deliciosa mezcla de novela visual, survival, RPG y aventura de exploración en donde, más allá de su sorprendente apartado artístico, el verdadero protagonista no es otro que el amor "imposible" de una joven y valiente pareja.
PROS
Su apartado artístico, tanto visual como sonoro, es una verdadera delicia
Toda una experiencia para disfrutar en pareja
Narrativamente hablando no tiene desperdicio...
CONTRAS
... aunque sus comienzos son algo pausados
No profundiza demasiado en ninguno de los géneros que toca
Los tiempos de carga, el reciclado de escenarios y algún que otro cuelgue
85