Análisis de NBA 2K20 – Nintendo Switch. Three-peat

NBA 2K20 es nuestro MVP

Fecha de lanzamiento
6 septiembre, 2019
Número de jugadores
1-10
Idiomas
Español, inglés, francés, etc
Tamaño de la descarga
39,9 GB
Nuestra puntuación
90

Si eres fan del deporte de la canasta, seguro que tenías bien marcado en el calendario el pasado mes de septiembre. China acogió el Mundial de Baloncesto y, a buen seguro, aún te dura la alegría tras ver a la selección española coronarse campeona del mundo. Pero es que, si además eres aficionado a los videojuegos, esta también suele ser la época elegida por 2K Sports para lanzar la correspondiente edición anual de su simulador de básquet, así que apuesto a que estabas esperando este análisis de NBA 2K20 con ansia viva. En NextN tuvimos la suerte de estar presentes hace unas semanas en su presentación en Madrid donde las sensaciones fueron muy prometedoras. ¿Quieres saber qué tal ha quedado el producto final? Pues no te hago esperar más: me visto de corto, ato mis zapatillas con 7 cámaras de aire y salto a la cancha para destripártelo.

 

 

Una plantilla con pocos cambios…

La saga NBA 2K es el referente indiscutible de su género y gran parte de la culpa la tienen los cimientos que la sustentan: jugabilidad, contenido y presentación. Visual Concepts, estudio encargado de su desarrollo, lleva años puliendo estos tres aspectos, añadiendo novedades puntuales y potencialmente interesantes para que el usuario no tenga la impresión de que se encuentra ante el mismo juego una y otra vez. Vamos que, cogiendo esta analogía con muchas pinzas, podría decirse que nos están ofreciendo Legacy Editions, pero Deluxe. NBA 2K20 supone la octava entrega de la saga para la presente generación (aunque sólo la tercera para Nintendo Switch), así que es lógico que esto se agudice un poco más con mejoras y añadidos menos numerosos y vistosos que en anteriores temporadas. 

 

Por fin las chicas hacen un salto inicial en la saga NBA 2K

 

Este año la más importante es la inclusión de las 12 franquicias de la WNBA, con las que podemos jugar partidos rápidos o una temporada completa. Evidentemente, echamos de menos algo más de “riesgo” por parte de 2K con esta apuesta (¿no estaría genial poder crear una baloncestista en el modo “Mi Carrera”?), pero es de justicia reconocer que la desarrolladora norteamericana ha realizado el trabajo con mimo. 

 

Las jugadoras están representadas con mucho detalle, pues han realizado capturas de movimiento específicas, y hasta podemos apreciar gestos o movimientos propios de cada una, especialmente de las más conocidas como Elena Delle Done (MVP de esta temporada y flamante campeona con los Washington Mystics), Candace Parker o la veterana Sue Bird. Precisamente esta última jugadora me sirve para mencionar que, aunque es obvio que se ha hecho de manera deliberada, estrellas de la liga como Bird o Breanna Stewart, que se han perdido la temporada por una grave lesión o Maya Moore, que ha decidido retirarse temporalmente de las pistas para “conocer a Jesús”, están presentes en el juego a pesar de saberse que este año no iban a disputar ni un minuto. 

 

 

Asimismo, el tempo y estilo de baloncesto de las chicas ha sido recreado muy fielmente y sólo nos costará unos segundos darnos cuenta de las diferencias jugables a las que nos tendremos que acostumbrar cuando saltemos a la cancha con ellas. Los partidos serán un poco más tácticos y menos vistosos, pero no por ello menos entretenidos. La verdad es que me parece una muy buena (y necesaria) incorporación que espero que gane peso y sea más aprovechada en las próximas entregas.

 

… aunque con bastante profundidad.

La enorme cantidad de modos de juego permanece intacta y podemos disputar desde un partido rápido con cualquiera de los más de 100 equipos seleccionables (contabilizando actuales y clásicos) hasta dedicarnos semanas enteras a conseguir la plantilla perfecta con las cartas de Mi Equipo. Tampoco faltan a la cita las pachangas callejeras de Blacktop, las modalidades centradas en la gestión Mi Liga y Mi GM, el útil y recomendadísimo entrenamiento/tutorial de 2KU, los programas semanales de 2KTV (Rachel A DeMita, cuánto te echo de menos!) o la forja de una estrella en el modo Mi Carrera. Como ves, en los aproximadamente 40 Gb de peso (recuerda que, aunque lo compres en físico, obligatoriamente tendrás que descargar una buena parte del título en una SD), hay diversión para todos los gustos. Eso sí, también en NBA 2K20, necesitamos conexión a los servidores de 2K para poder disfrutar de Mi Carrera o Mi Equipo, por lo que, si no disponemos de ella, algo muy probable si no estamos en casa, el contenido y posibilidades del juego se ven mermados.

Tampoco ha variado mucho todo lo relacionado con la presentación de los partidos y, en general, se nota un apartado gráfico más pulido, especialmente en animaciones, modelado de jugadores y efectos de iluminación, aunque los problemas puntuales en peinados y barbas o la rigidez de los uniformes que nos acompañan desde NBA 2K18 siguen con nosotros. Refiriéndonos al offline, el motor del juego se desenvuelve de manera muy fluida con la consola conectada al dock (a 30 FPS muy estables), mientras que en modo portátil podemos apreciar algún tirón muy anecdótico durante los partidos o bajadas significativas de la tasa de cuadros en secuencias cinemáticas, algo que probablemente se arregle en alguno de los próximos parches. En los encuentros en línea que he disputado, la sensación es igual de buena ya que, tras la actualización 1.3 se han reducido las ralentizaciones y, sobre todo, el input lag, que empeoraban notablemente la jugabilidad. Como es normal, el nivel de texturas o detalles es inferior al de otras versiones, pero NBA 2K20 para Nintendo Switch conserva la aparente solvencia a nivel técnico de entregas previas y los recortes afectan a detalles estéticos, salvo algún caso específico como la imposibilidad de hacer fotos o vídeos directamente con la consola (algo que ya sufrimos en el 2K19). Aún hay cierto margen de evolución pero, como seguramente sabes, los títulos de esta saga son como el vino y suelen mejorar con numerosas actualizaciones y por eso en NextN nos tomamos nuestro tiempo para analizarlos.

 

Curry puede usar NBA 2K20 para mirarse al espejo.

 

El trabajo sonoro mantiene su excelsa calidad, sobre todo en lo que respecta a los comentarios en versión original, que se han actualizado añadiendo un nuevo trío de narradores muy solvente y específico para los partidos de la WNBA y el previo de Mi Carrera. En español, y sólo en los encuentros masculinos, repiten, con sus fallos, recortes en presentación y sin novedades, los habituales Sixto, Quiroga y Daimiel. La banda sonora vuelve a estar protagonizada en su mayoría por temas de hip hop y 2K ha prometido que será “dinámica”, actualizándose con nuevas canciones a lo largo de la temporada. Por su parte, los efectos de sonido gozan, una vez mas, de un nivel sobresaliente, con los cánticos auténticos de las distintas aficiones (esperad el «Beat L.A.» si manejáis a los Lakers y os enfrentáis a un final ajustado) o los gritos de jugadores adaptados a la acción como sus máximos exponentes.

 

Salto inicial

Ya en la cancha, los partidos siguen siendo un exponente sobresaliente en cuanto a simulación, aunque las diferencias con entregas pasadas son evidentes. En contra de lo que suele ser habitual, las novedades más palpables se han centrado más en el ataque que en la defensa. El ritmo de juego es más realista, motivado por la importancia que le han dado los desarrolladores a la velocidad específica de los jugadores, con especial hincapié en las arrancadas. Y es que en NBA 2K20 se nota más que nunca la diferencia entre hombre bajos y altos, lo que provoca que tengamos que actuar en la pista con más cabeza que nunca para aprovechar las cualidades de los miembros de nuestra plantilla y las limitaciones de los rivales. Este componente táctico afecta a la curva de dificultad, por lo que alguien nuevo en la saga puede tardar algo más en obtener su primera victoria que en versiones previas. Afortunadamente, los cambios en el sistema de tiro, con mejoras en el timing, facilitan algo la consecución de canastas, así que es difícil que alguien pueda llegar a frustrarse aunque no gane. 

 

Este año las acciones bajo el aro tienen una efectividad mucho más ajustada a la realidad.

 

Pero no pienses que esto se ha convertido en un correcalles estilo NBA Live porque la IA se encarga de equilibrar las cosas. En líneas generales repite los patrones de años pasados, aunque en la versión que he jugado para hacer este análisis, he notado que hacer o recibir tapones bajo canasta es demasiado sencillo y que, en ocasiones, parece que hay un muro invisible que hace que el baloncestista que manejas se resista a acabar la jugada metiéndola para abajo y decida lanzar un tirito desde el borde de la zona. Aún así, en general, las animaciones han ganado coherencia aunque, quizá debido al tema de las arrancadas, he notado que los jugadores más rápidos a veces patinan sobre la cancha en lugar de correr.

 

Mercado de Fichajes

Previamente a la irrupción de las secciones estilo “crea tu jugador”, el plus de calidad de los buenos títulos deportivos residía en su apartado mánager. Esta saga siempre ha destacado en este aspecto y, antes con La Asociación o ahora con Mi Liga / Mi GM, nos ha presentado apartados más completos que juegos dedicados exclusivamente a la simulación de gestión deportiva. NBA 2K20 no es diferente y, si somos meticulosos o perseverantes, podremos llegar a la edad de jubilación sin haber salido de estos modos. ¡Y sin necesidad de moneda virtual!

 

En Mi Liga, que también podemos disputar online, nos encontramos exactamente la misma experiencia que la temporada pasada, así que sería injusto no tirarle de las orejas a los desarrolladores pues, aunque su profundidad es enorme, no han incluido ninguna novedad que invite por sí sola a dedicarle nuestro tiempo a este apartado. 

 

 

Mi GM, sin embargo, sí presenta cambios importantes en NBA 2K20. El (ligerísimo) componente RPG adquiere una nueva dimensión con el estreno de los Puntos de Acción, que vienen siendo los turnos de los que disponemos cada día para realizar las acciones que consideremos necesarias para llevar a nuestra franquicia (y nuestro ego) a lo más alto. Entre las tareas que podemos realizar están entablar absurdas conversaciones con los jugadores o empleados para intentar motivarlos y ganarnos su confianza, cambiar precios de entradas o merchandising para aumentar los beneficios, gestionar traspasos y contratos o jugar partidos. He dejado los partidos para el final porque, a causa de este componente estratégico, quizá el tomar las riendas del equipo sobre el parqué no sea lo más importante durante buena parte del tiempo. Además, mientras tu relación con el cuadro técnico no sea estrecha, no puedes tomar ninguna decisión táctica durante los encuentros, así que, las posibilidades de derrota son mayores controlando manualmente a los baloncestistas que simulando la acción. 

 

Podemos jugar, saltarnos los partidos o simularlos pudiendo actuar en cualquier momento si lo vemos necesario.

 

A medida que vas progresando, obtienes puntos de experiencia que te permiten desbloquear habilidades al completar ciertos objetivos que, ahora, pueden encargarnos más gente que el dueño del equipo. Éstas están representadas por un árbol en el que seguir una u otra rama entre las cinco disponibles potencia el estilo de mánager que creas que más te conviene para forjar una dinastía dentro de la liga. Sobre el papel, lo cambios parecen interesantes pero, de primeras puede desanimar un poco el hecho de que sea necesario “chuparse” tanta cinemática con charla para avanzar, ya que, además, las conversaciones son bastante repetitivas y pierden la gracia bastante rápido. Afortunadamente, puede acortarse el sufrimiento pulsando continuamente el botón A. Eso sí, una vez alcanzas un nivel que aumente tus posibilidades de control, este modo se vuelve tremendamente interesante.

 

 

Tope salarial

Un análisis de un NBA 2K no es completo sin hacer mención a los micropagos, y menos este año con la polémica que se formó tras un nada acertado tráiler en el que se mostraban ruletas y tragaperras como parte fundamental de NBA 2K20 y, cuya presencia real, afortunadamente, no es demasiado determinante ni necesitas hace uso de tus ahorros para su uso. La ludopatía es un problema muy serio que se debe tratar con mucha sensibilidad y hacer apología de ella es algo muy poco ético. Mención aparte merece la calificación PEGI, que indica que esta entrega está destinada a personas con 3 o más años. Este organismo europeo de clasificación argumenta esta decisión en que “las apuestas son simplemente parte de la historia general del juego” y no animan al usuario a apostar dinero auténtico en la vida real, algo que resulta cuando menos discutible.

 

¿Te sobran 100 euritos para llegar al estrellato de manera inmediata?

 

El debate de las cajas de botín y los micropagos no es exclusivo de esta saga baloncestística, viene de viejo y, salvo que vivamos en países como Bélgica, parece que aún tardaremos un tiempo en ver una solución al problema. Desde 2K insisten en que escuchan a la comunidad y afirman que cada temporada intentan racionalizar el uso de VC, la moneda virtual del juego. Si bien es cierto que este año se ha atenuado su importancia, el “pay-to-win” para los más ansiosos sigue presente, algo moralmente reprobable en un título que pagamos como “versión completa” y que desvirtúa el componente comunitario. Las novedades a este respecto son un buen primer paso y, por ejemplo, en Mi Equipo, el modo que más (ab)usa de estas microtransacciones, se ha potenciado la modalidad individual, mejorado el matchmaking o las recompensas, con novedades como premios que recibimos sólo por iniciar sesión, y se ha restringido el uso de jugadores fuera de su posición natural para evitar quintetos o tríos abusivos. Por su parte, en Mi Carrera se ha escondido un poco El Barrio, al que no acudimos obligatoriamente tras cada encuentro y que es donde se encuentran los diferentes tipos de canchas donde podemos enfrentarnos online con otros usuarios, para lo cual es fundamental tener un avatar con buen nivel.  Además, se ha balanceado mejor la relación entre recompensas y mejoras, por ejemplo, aumentando la cantidad de VC que obtenemos como sueldo básico por jugar.

 

A pesar de esto, tener una plantilla o un jugador competitivos sin gastar un euro en estos modos requerirá que invirtamos una considerable cantidad de horas. Personalmente, quizá porque soy un jugador “entrado en años”, nunca he sentido la necesidad de gastar un solo euro (con las pesetas no existía este problema) en este tipo de simuladores, pues prefiero alcanzar mis objetivos a base de esfuerzo y no tengo prisa en ser el rey de la pista. Como ya he dicho en otras ocasiones, soy de la opinión de que el uso de microtransacciones debería ser más una opción que una obligación y a esta saga, aunque parece que NBA 2K20 ha avanzado un poco en la dirección correcta, aún le queda un largo camino para lograrlo.

 

La Liga Fantástica

A propósito de este tema, el modo en el que los micropagos pueden tener más peso es Mi Equipo. El objetivo es el de siempre: crear el mejor equipo posible mediante la compra de packs de cartas con las que obtenemos jugadores, entrenadores, canchas, etc… Puedes jugar de manera individual pero esta modalidad está más pensada para ser disfrutada enfrentándonos a equipos de otros usuarios, por lo que es esencial tener una plantilla competitiva. Para lograr esto necesitamos tener una buena colección de cartas y los sobres que las incluyen se compran con moneda virtual que se obtiene como recompensa tras jugar partidos (el monedero es compartido con los otros modos de juego que utilizan las VC) o, de manera muchísimo más rápida, pasando por caja. También contamos con los puntos MT, que no se pueden comprar con dinero real y que sirven únicamente para acceder a las subastas donde otros usuarios (o nosotros) ponen cromos que no les resultan útiles, o fichas para canjear por cartas exclusivas.

 

Mi Equipo es, en esencia, igual que el año pasado, aunque presenta novedades como la introducción de las Cartas de Evolución. Éstas, tras cumplir objetivos concretos, permiten mejorar los atributos y subir el nivel del baloncestista representado en el cromo hasta el límite que permita su carta, que no será el mismo en todas. En nuestro mazo gratuito de bienvenida podemos elegir una entre cinco posibilidades, con una estrella retirada por puesto en la cancha. Esto añade un interesante componente estratégico a nuestra manera de jugar en función de la evolución que necesitemos proporcionar a los jugadores protagonistas de este tipo de cromos que, por cierto, son permanentes.

 

¡Llevemos a Derrick Rose al nivel al que debió llegar si no se hubiese lesionado!

 

Una de las maneras de conseguir Cartas Evolución es ganando a plantillas actuales en el submodo Dominación, cuya meta es la misma de siempre pero este año se presenta con tres dificultades que, lógicamente, influirán en el nivel de las recompensas que otorgan. De más fácil a más complicado, tenemos que vencer a las franquicias de la presente temporada, a los equipos clásicos de más nivel o a una selección de los mejores de todos los tiempos.

 

 

Otras incorporaciones están visibles desde la pestaña Inicio del menú principal y son las secciones Hoy en Mi Equipo y el Centro de la Comunidad. En la primera se nos muestran eventos temporales, adaptados a los horarios de las distintas regiones, los cuales nos permiten ganar recompensas especiales, y una especie de agenda que nos describe los distintos desafíos que podemos superar y el tiempo que disponemos para ello. Por otro lado, Centro de la Comunidad no es otra cosa que una especie de tablero donde podemos ver estadísticas del modo, participar en encuestas o incluso preguntar a los desarrolladores, quienes tratarán de responder en vídeos semanales al estilo 2KTV y que se ven desde esta sección. 

 

La cancha de Triple Amenaza está en el TOP 1 de pistas horteras.

 

 

En cuanto al resto de submodos de Mi Equipo, regresan sin mucho cambio los Desafíos Semanales, que incorporan la variedad “Bajo los focos” para un jugador y Triple Amenaza, con un rediseño importante de su variante individual. En estos piques rápidos 3 vs 3, el trío rival cambia en cada enfrentamiento y está compuesto por elecciones aleatorias entre todas las cartas disponibles en el momento de jugar. Además, los premios vienen definidos por el número de victorias que vamos consiguiendo, siendo la carta Ópalo Galaxia de Dominique Wilkins la mayor recompensa disponible y podemos hacernos con ella ganando 1000 (mil) partidos. Simple, ¿verdad? (SPOILER: NO) Además, tras cada triunfo, podemos hacernos con más gratificaciones abriendo una caja fuerte, que ha venido a sustituir, con bastante acierto, a las tragaperras que nos mostraron en el tráiler previo al lanzamiento. Si optamos por jugar online, volvemos a efectuar tiradas de balón al estilo pachinko.

 

Quiero ser Rookie del año

Otro de los puntos que genera más interés por la saga en las últimas ediciones es Mi Carrera. En esta ocasión, la historia que sirve como envoltorio a este modo se titula “When the lights are brightest” (traducido como “Cuando brillas con luz propia”) y en su creación está involucrada SpringHill Entertainment, empresa de contenidos propiedad del mismísimo LeBron James. En ella adoptamos el papel de Che, una promesa universitaria de último año que se niega a jugar un partido decisivo para su equipo como protesta ante una injusticia cometida por el entrenador hacia uno de sus compañeros. Esto marca sus/nuestras posibilidades de cara al Draft, así que tenemos que poner toda la carne en el asador para hacernos valer como merecedor de un puesto en una de las franquicias de la liga. 

 

El apodo de Che no es casualidad.

 

Pero, antes de que empiece el carrusel de cinemáticas, debemos definir nuestra apariencia y habilidades en un renovado editor que, según la desarrolladora, nos permite crear más de 100 arquetipos distintos mediante las diferentes combinaciones posibles de atributos, perfiles o insignias. Como novedad, podemos probar el potencial de nuestra creación en un partido y cambiarlo tantas veces como queramos hasta encontrar el que más se ajuste a nuestro estilo de juego antes de empezar la aventura. Como curiosidad, comentar que a fecha de publicación de este análisis no he sido capaz de escanear mi cara con la app de compañía de NBA 2K20 para Android, que parece más rota (aún) que nunca. 

 

¡Los quesitos del Trivial llegan a NBA 2K!

 

Completar esta especie de prólogo lleva alrededor de 4 horas, algo menos que otros años, entre partidos, tomas de decisiones o pruebas del Draft Combine. Estas últimas, aunque hacen gala de un control discutible, ayudan a meterse más en todo lo que rodea la vida de un potencial rookie. Cinematográficamente hablando, presenta un aspecto muy trabajado, sobre todo en iluminación y montaje de planos. Luce bastante bien y, aunque en modo portátil las cinemáticas sufren caídas de framerate habituales, en líneas generales la historia mantiene un nivel similar a las de juegos previos. Se nota la mano de LeBron y su equipo en la trama pues, aunque el guión está lleno de tópicos y con más emplazamiento de producto del que es deseable, la temática es mucho más profunda y, a priori, realista que la de entregas anteriores. A esto contribuyen las notables actuaciones de los protagonistas, con actores reconocidos como Idris Elba (Luther), Rosario Dawson (Sin City) o Thomas Middleditch (Silicon Valley) dentro de un elenco que también incluye a algunas estrellas de la liga, digámoslo así, un poco más limitadas en cuanto a capacidades dramáticas.

 

 

Una vez terminada la historia y tras conseguir ser elegidos por un equipo de la NBA, empieza nuestra carrera real hacia el estrellato. Se nos abre la posibilidad de acceder a El Barrio que, como he comentado antes y a diferencia de años anteriores, no es de visita obligada. Esto significa que es posible disfrutar de Mi Carrera a la vieja usanza, es decir, simplemente jugando partidos de la NBA, lo que aleja bastante la tentación de caer en las garras de los micropagos si el ansia viva no nos vence. Pero, si lo nuestro es fardar de jugador en el online, pasar por El Barrio es indispensable y, con ello, aumenta la probabilidad de acabar sin ahorros, porque el camino más fácil para no ser abochornado en las pistas es gastar dinero real para alcanzar el nivel 85 (el máximo posible mediante monedas) en los segundos que tarde en ejecutarse tu pago. Llegar a 99 requerirá de esfuerzo y pericia a los mandos y, una vez conseguido el tope, este año tenemos que mantenerlo, pues nuestra valoración puede fluctuar 4 puntos dependiendo de nuestro desempeño.

 

 

El aspecto de este espacio urbano es prácticamente igual al de la entrega previa, con las mismas canchas y edificios, aunque será un entorno más vivo ya que, por ejemplo, notamos los cambios de estación.

 

Por si eres rookie en la saga, El Barrio es una especie de mundo abierto limitado (?) donde podemos interactuar con otros usuarios que se encuentran en línea y realizar actividades para ganar o gastar moneda virtual. Repiten instalaciones como El Parque (los playgrounds de toda la vida), Pro-Am (el mejor lugar para ganar VC y, en esta ocasión, con posibilidad de jugar en equipos de 5 ó de 3), REC Center (una especie de Pro-Am sin necesidad de jugar con un equipo de amigos) y The Cages (canchas callejeras enrejadas, con reglas y suelos especiales) como lugares donde medirnos a otros jugadores, así como las tiendas, establecimientos para retoques estéticos o de apuestas como sitios donde gastarnos los VC. Además está nuestra casa, el clásico gimnasio y la pista de entrenamiento de nuestro equipo, donde podemos potenciar ciertos aspectos de Che. Las mayores novedades de NBA 2K20 son la vuelta del sistema de reputación, con el que puedes desbloquear privilegios exclusivos además de hacerle ver a la gente quién es el amo del lugar, y el Disc Golf, que es un circuito “oculto” por callejones del barrio en el que tenemos que meter un frisbee en unas cestas en un número específico de tiradas para ganar VC. La idea me parece original, pero el deficiente control hará que no le dediques mucho tiempo. Si a esto le sumamos los eventos especiales limitados que se celebran esporádicamente, estoy seguro de que Mi Carrera será uno de los modos con los que más disfrutarás.

 

 

¡Y esto define el Disc Golf a la perfección, amigos!

 

Tiempo muerto

Pero, para sacarle partido a El Barrio, es fundamental una comunidad online numerosa y eso, una vez más, no lo tiene la versión de NBA 2K20 para Nintendo Switch. Es cierto que resulta bastante fácil echar pachangas en El Parque, sobre todo en fin de semana, y rara vez encuentro todas las canchas vacías (algo que era muy frecuente en las ediciones de 2K18 y 2K19) pero hay modalidades que no he sido capaz de probar en las horas que he dedicado al juego para su análisis

 

Afortunadamente en NBA 2K20 es sencillo encontrar peñita para echarse unos piques y ganar reputación.

Dos claros ejemplos son The Cages y Ante Up, cuyos recintos suelen estar más vacíos que los escenarios del Breath of the Wild (?) y otro es el REC Center, donde he llegado a esperar más de diez minutos a que apareciese algún compañero de equipo con el mismo éxito que el Hello Kitty Kruisers en The Game Awards… ¡algo que obliga a reiniciar el juego para poder continuar! Supongo que tendrá que ver con que la afluencia en los servidores europeos demuestra el mediocre interés por la saga para Nintendo Switch en nuestro continente, pero es una pena no poder disfrutar de algunas características de NBA 2K20 por esta clase de motivos.

 

 

Rueda de prensa post partido

Si, como suponía al principio, eres fan del básquet y los videojuegos, NBA 2K20 es la mejor y más completa opción para disfrutar del deporte de la canasta en Nintendo Switch. Por tercer año consecutivo, vuelve a ser inmenso en cuanto a cantidad y variedad de contenido, estando a la par del resto de versiones. Las sensaciones tras los mandos al saltar al parqué continúan siendo muy realistas y, aunque obviamente sigue por debajo de las entregas para otros hardwares, técnica y jugablemente ha subido un peldañito (mínimo) más. Lamentablemente, puntos negros de años anteriores como el controvertido aunque suavizado “pay-to-win” o la dependencia de tener conexión a internet (que lastra la portabilidad) siguen estando presentes en algunos modos. Quizá las novedades y mejoras de esta entrega puedan no ser suficientes para algunos usuarios que hayan jugado a ediciones pasadas pero, las que hay, demuestran que 2K Sports y Visual Concepts no se han limitado a hacer un corta y pega del título de la temporada anterior, acercándose un poco más a la excelencia en los simuladores de baloncesto.

 

Hemos analizado NBA 2K20 gracias a un código digital cedido por 2K Games España. Versión analizada: 1.03

 

LA SAGA 2K SIGUE EN FORMA
NBA 2K20 es el mejor y más completo simulador deportivo del momento. Técnicamente superior a la entrega de la temporada pasada y con modos de juego para aburrir, asegura cientos de horas de diversión si eres aficionado al baloncesto... y tienes paciencia! De lo contrario, la necesidad de pagar para ganar puede estropear la experiencia, aunque este año es un poco más fácil no hacer el ridículo en las pistas sin abrir el monedero.
PROS
El gameplay es más fluido y realista que nunca
Técnicamente luce aún más soberbio que la edición anterior
Horas y horas de baloncesto en tus manos, con modos para todos los gustos 
CONTRAS
Los micropagos y la descarga obligatoria siguen ahí
La comunidad online, por lo menos en Europa, sigue siendo reducida
El modo Mi Liga llega sin ninguna novedad
90
Mostrar Comentarios (2)
  1. Grandísimo análisis para un tremendo juegazo.

    Es mi primer NBA 2K en Switch y me lo esperaba mucho peor parado, pero me he encuentrado un port fantástico, con sacrificios en el apartado visual como es lógico, pero con todos sus modos de juego y sin recortes en lo jugable. (¡Aprende EA!)

    Sobre el juego, poco más que decir que no se haya comentado en el análisis. Me parece un juegazo tremendo (150 horas que llevo ya xD) pero no lo recomendaría en Switch a los que: lo quieran para jugar exclusivamente on-line o le piensen dar duro al modo Mi Equipo.

    Básicamente, como se comenta en el análisis, el juego en Switch tiene una comunidad muy pequeña.

    A según qué horas es complicado encontrar partidas y lo peor es en el modo Mi Equipo: hay pocas cartas a la venta en subasta, muchas de ellas tienen precios desorbitados, hay jugadores que directamente encontrarlos es casi imposible y vender las cartas a un precio decente cuesta un montón. Suerte de los jugadores Evolución que en cierto modo mitigan algo el tema, se suelen encontrar baratos (aparte de los que podemos conseguir en sus respectivos desafíos o como recompensas de dominación) y una vez subidos de nivel son de las mejores cartas del juego.

  2. Gracias por el cumplido y por haber leído semejante tocho, @Kisuke_e79. Totalmente de acuerdo con tu apreciación pero, como digo en el análisis, en años anteriores el tema del tamaño de la comunidad aún era más acusado, así que, imagínate. Tengo el 2K19 en Switch y PS4 y, por ejemplo, entrar en El Barrio era totalmente diferente porque uno era un desierto y otro parecía el primer día de rebajas en El Corte Inglés. Pero bueno, eso no es culpa de 2K, que creo que nos ha vuelto a brindar una versión muy digna para nuestra híbrida y que asegura diversión hasta la salida de la próxima entrega… salvo que seas un ansioso!