Va-11 Hall-A Análisis Destacada

Análisis – VA-11 HALL-A (Nintendo Switch). Un cóctel por favor

¿Sueñan los humanoides con baristas eléctricos?

Va-11 Hall-A Análisis Let's info
Fecha de lanzamiento
2 mayo, 2019
Número de jugadores
1
Idiomas
Inglés, Japonés
Tamaño de descarga
592,45 MB
Nuestra puntuación
80

Las novelas visuales nunca han sido mi género predilecto. Las ingentes cantidades de texto y una jugabilidad generalmente comedida que ni me llama la atención ni consigue atraparme cuando pruebo sus mieles no son suficiente para saciar mi sed de jugador. Sin embargo, hacía tiempo que un título de esta escuela rondaba mis pensamientos de vez en cuando, más aún desde su anuncio para la híbrida de Nintendo. Un juego con un planteamiento poco común ambientado en un futuro donde, para sorpresa de nadie, los “humanoides” viven entre nosotros. Una obra distópica que aborda la sociedad que presenta desde un punto de vista diferente. Analizamos VA-11 HALL-A para Nintendo Switch.

 

 

Hora de hacer cócteles y cambiar vidas

VA-11 HALL-A se autodefine como un “simulador de barista cyberpunk”, y la verdad es que no podría pensar en una mejor forma de contar, a grandes rasgos, qué es este juego. A lo largo de una serie de jornadas laborales encarnamos a Julianne ‘Jill’ Natalie Stingray, una barista que, en una interpretación del futuro al más puro estilo de las películas de ciencia ficción de los años 80, sirve copas en el VA-11 HALL-A o, simplemente, Vallhalla. Es aquí donde se desarrolla toda la acción del juego, por lo que pronto nos acostumbramos al espacio que conforma el bar y, lo que es aún más curioso, cogemos un cierto cariño hacia ese escenario tan tenue como colorido.

 

Nuestro cometido en VA-11 HALL-A es realmente sencillo, y puede resumirse en la frase que Jill pronuncia al principio de cada jornada: “Hora de hacer cócteles y cambiar vidas”. Esto es, precisamente, todo lo que hacemos cuando estamos trabajando dentro de la aventura. Llega un cliente, totalmente nuevo o ya conocido, y comienza una charla con Jill que empieza a construir la identidad de cada personaje, incluida nuestra protagonista. De vez en cuando el consumidor nos pide que le preparemos una bebida, y es aquí donde encontramos el centro de la jugabilidad de VA-11 HALL-A. Gracias a un pequeño libro de coctelería disponible en todo momento y a un sistema de mezcla de ingredientes con un control realmente bien adaptado a consola, somos capaces de realizar las variopintas combinaciones que el juego nos introduce. Al principio los clientes hacen peticiones sencillas, pero a medida que avanzamos el reto aumenta, ya sea porque los personajes asiduos solicitan “lo de siempre” o porque Jill está en las nubes y no es capaz de recordar lo que nos han pedido dos líneas de diálogo atrás, por lo que debemos echar mano de nuestra propia memoria.

 

Va-11 Hall-A análisis 02

Es así como el VA-11 HALL-A se convierte rápidamente en el centro neurálgico de los secretos de humanos, humanoides modificados gracias a la tecnología y otros personajes tan variopintos como perros de raza “Corgi”, por alguna razón. La idea de que los habitantes de una sociedad como esta cuenten sus inquietudes a un barista me resulta muy inteligente, pues es el ejemplo perfecto de cómo a veces confiamos información sensible a personas que probablemente nunca volvamos a ver, precisamente por este motivo. Así, esta obra es un viaje de descubrimiento del mundo que crea.

 

“Ponme una bebida dedicada al mejor amigo de su creador, por favor”

Al final de cada jornada Jill regresa a su apartamento, y en este momento podemos guardar la partida, comprar algunos adornos y objetos para su habitación con nuestro salario o husmear las diferentes aplicaciones de su teléfono móvil que, generalmente, consisten en leer noticias que podrían tener relación con temas de conversación del siguiente día de trabajo. Es un momento de calma y transición entre los distintos “niveles” del juego. Un instante en el que el título parece decirnos que es un buen momento para descansar. VA-11 HALL-A no quiere que lo completes en una maratón de 10 horas jugando, sino que te tomes tu tiempo y disfrutes el viaje a lo largo de serie de ratos de, aproximadamente, una hora de duración.

 

Visualmente, el título cumple con creces. Presenta un “pixel art” de buena calidad cuya mayor baza es, probablemente, el diseño de los personajes y el contraste entre los colores que vemos en pantalla y el tono general de una sociedad distópica. Cada individuo luce un diseño perfectamente acorde a sus personalidad y motivaciones. El apartado sonoro, por otro lado, ofrece una buena variedad de temas electrónicos, como no podía ser de otra forma. Un punto positivo de este aspecto es su coherencia con el planteamiento del juego, pues la música que escuchamos es la que nosotros decidimos poner en el bar para disfrute de nuestros clientes. Aunque ninguna de las canciones que conforma la banda sonora es memorable, es cierto que acompaña de forma agradable a lo largo de nuestras largas jornadas de trabajo. El único punto negativo que encuentro es que seguramente elijáis una selección de composiciones al comienzo del juego y no la alteréis jamás, lo que desvirtúa el sentido de que VA-11 HALL-A nos ofrezca esta posibilidad de selección.

 

Va-11 Hall-A análisis 06

 

Por último, considero imprescindible hablar del tono general de la narrativa. VA-11 HALL-A construye su historia a través de un registro desenfadado y que nos puede sacar más de una carcajada. Cabe decir que no es un título adecuado para los más pequeños de la casa, pues constantemente se tocan temas más apropiados para un público adulto como el sexo, así como aspectos filosóficos difícilmente entendibles por los niños. Junto con esto, es pertinente destacar el que la obra no se encuentra disponible en español, por lo que si no poseéis un nivel medio (a mi juicio) de la lengua anglosajona, este es un juego a evitar para vosotros.

 

VA-11 HALL-A – Un vodka doble y a dormir

Va-11 Hall-A me ha sorprendido gratamente. He jugado a otras obras del género de la novela gráfica anteriormente, como Nine Hours, Nine Persons, Nine Doors (999) para Nintendo DS. La mayor parte de estas aventuras se me hacen pesadas debido a la gran diferencia de proporción entre texto y acción. Sin embargo, Va-11 Hall-A tiene algo especial. Sus personajes son coherentes y carismáticos, y las historias que cuentan tienen sentido en el mundo que se nos propone. El diálogo es asombroso y es fácil conectar con las vivencias de cada cliente (incluso de los perros “corgi”).  Un título, en pocas palabras, que recomiendo a cualquiera con ganas de tirarse en la cama o el sofá con su Nintendo Switch y una bebida con mucho hielo y, simplemente, entrar en el futuro distópico que propone.

 

Va-11 Hall-A análisis 04
¡Cálmese, señora!

 

Este análisis ha sido posible gracias a la cesión de un código de descarga de VA-11 HALL-A para Nintendo Switch por parte de Sukeban Games.

 

Va-11 Hall-A Análisis Destacada
Cada cóctel tiene su historia
VA-11 HALL-A ofrece una experiencia sólida en el marco de la novela visual. Un título muy recomendable con un planteamiento diferente, unos personajes carismáticos y bien construidos y un diálogo soberbio que no dejará a nadie indiferente.
PROS
Personajes bien construidos y carismáticos
Diálogos soberbios
Acercamiento a la sociedad distópica desde un punto de vista diferente
CONTRAS
Ausencia de traducción al español
La posiblidad de seleccionar la música que escuchamos queda desvirtuada por su falta de importancia
80