Agosto de 2011 será un año que difícilmente olvidaré. Xenoblade Chronicles había caído en mis manos, sin saber mucho qué esperar de él. ¿Y sabéis qué? Me marcó para siempre. Desde adolescente, he sido muy fan de los RPG, y no voy a mentir: llevaba muchos años, desde los tiempos de SNES, sin llevarme una joya de este calibre a la consola. Chrono Trigger, Final Fantasy VI, Terranigma, Secret of Mana e infinidad de títulos más, dejaron el listón muy alto… y entonces comencé mi aventura a través de Bionis y Mekonis en aquel impresionante juego de Monolith Soft, que volvió a dejar las cosas muy complicadas para que, en lo personal, ningún otro RPG pudiera alcanzarlo en muchos años. Lo más parecido, su «secuela», Xenoblade Chronicles X, título del mismo género que guardaba una muy distante relación con la primera entrada de esta serie, compartiendo sistema de combate muy parecido, sistema de afinigrama, colecciclopedia, algunas razas de personajes, enemigos, sistema de misiones… y otras diversas cuestiones que acercaban unas experiencias, tan similares como distintas, pues una parte importante se había perdido por el camino ¿Dónde había ido toda la magia de esa primera entrega? Se la estaban reservando para Xenoblade Chronicles 2.
Tras largas horas en la Alrest de Xenoblade Chronicles 2…
Con varias decenas de horas a nuestras espaldas, nos encontramos hoy aquí para hablaros de Xenoblade Chronicles 2, tratando de realizar la menor revelación / spoiler posible. Nuestro avance nos ha llevado hasta el inicio del capítulo 4, algo que podría sonar a poco, pero que en realidad ha sido un satisfactorio viaje repleto de sorpresas que llega a confirmar que el “2” del título no está puesto por azar. No nos referimos a que las historias puedan estar conectadas, eso es algo que tendrás que descubrir por ti mismo, sino que todo lo que conlleva la promesa de Rex de llevar a Pyra hasta el Elíseo, sin duda alguna nos está dejando un inmejorable sabor de boca.
Porque sí, la mayor preocupación de un fan de la primera entrega (no remontándonos a la serie Xenogears), es precisamente si todo aquel mimo puesto por sus creadores se encuentra en Xenoblade Chronicles 2. Para empezar, toca decir que existen diversos elementos podrías echar en falta, como el hecho de que la gestión de armaduras, tal y como la conocíamos, simplemente no existe. Sí que podrás equipar objetos que mejoren tus habilidades, pero algo muy característico de los dos títulos anteriormente lanzados era que cada pieza de armadura era distinta, cambiaban al personaje. Es decir, se ha perdido este grado de personalización…y por otro lado, se ha respetado la riqueza del personaje principal. Dejando atrás al “mudo” avatar de Xenoblade Chronicles X, esta entrega nos presenta a Rex, un jovencísimo buceador que vive sin mayor preocupación que rescatar tesoros perdidos en el océano de nubes, para poder enviar dinero a su familia. La vida transcurre a lomos de Abu, un “pequeño” Titán que sirve de embarcación a nuestro héroe, llevándolo de aquí para allá según necesite; no ahondaremos más en lo que ocurre a continuación, pero sí en un principio podría parecer que se trata del típico personaje de anime dispuesto a todo por ayudar a sus amigos… pues así es, pero añadiríamos que es mucho más que eso.
Xenoblade Chronicles 2 está repleto de historia constante que prácticamente te arrastra a empatizar con los protagonistas de la historia. Sus personalidades están muy definidas, algunas podrían considerarse cliché, pero el incesante número de situaciones puestas en armoniosa escena cuentan una historia que va mucho más allá de los argumentos convencionales, recordando en esto a la primera entrega; como contaba al principio, el primer Xenoblade Chronicles supuso mucho a un servidor, en gran parte precisamente por un constante argumento que me tuvo un centenar de horas enganchado a mi Wii. A cualquiera que albergue dudas respecto a esta secuela, le diremos que puedes estar muy tranquilo. Humor, amistad, momentos épicos, sentimientos, inesperados giros, una guerra de trasfondo, personajes con un pasado que querrás conocer… tiene todos los ingredientes para convertirse en una historia para recordar por siempre. La pregunta de cualquier fan del primer capítulo podría ser: ¿está Rex a la altura de Shulk? Es algo que aún tenemos que descubrir, pero lo visto hasta el momento es más que prometedor.
Pero “X” también nos encantó a su manera, una gran diversidad de cosas las hacía bien y ofrecía una increíble libertad de exploración como pocas veces hemos vivido, algo que se volvió en su contra a la hora de dar peso al argumento. Tras un número considerable de horas de juego, conseguías un Skell que más adelante te permitiría volar a tu antojo; poder ir donde quieras hace que desaparezca en gran parte la magia de la exploración. Eso de “¿cómo llego hasta allí?”, perderte tratando de encontrar el camino… además, esa libertad chocaba con el argumento, dando situaciones absurdas. Digamos que esto no sucede en Xenoblade Chronicles 2, puesto que estamos ante un juego más guiado y lineal en el avance de su argumento, recordando en ese sentido a la primera entrega; no malinterpretes estas palabras, pues no significa que se trate de algo negativo.
Acerca del mundo, y comparando de nuevo con Xenoblade Chronicles X, cambiaremos a las extrañas criaturas de aspecto extraterrestre, por algunas conocidas y no menos extrañas, y aquel vasto mundo que explorar con plena libertad, por uno donde los límites de los personajes están bien marcados, pero que por contra tiene mucho más encanto que el planeta Mira. No por la belleza de sus paisajes, que también lo son, sino por la riqueza de su población, pueblos y ciudades.
Del sistema de batalla también nos gustaría hablar, puesto que se trata de una novedad en la serie que trata de simplificar las cosas, asignando ataques a los botones para que sean más rápidos de realizar. Los personajes en realidad no tienen armas propias, sino que dependerán del Blade que les acompañe, habiendo diversos tipos con sus propias artes que podrás mejorar a medida que vayas haciendo uso de ellas. El secreto tras el sistema de combate está en dominar las combinaciones entre poderes de los personajes, cambiando de Blade o interactuando con los ataques especiales de otros personajes. Por ejemplo, piensa en un personaje que cause «desprotección» con las habilidades de un Blade concreto, para combinar con otro Blade que pueda a continuación causar «derribo»… y así enlazando estados que pondrán en desventaja a tus rivales.
Los tutoriales harán que no te sientas perdido a la hora de aprender todas estas técnicas, que no se encuentran recogidas en ningún manual, al menos no por ahora. Es una pena no poder consultar estas cosas con calma, por lo que un consejo es sacar capturas si no tienes algo claro, para poderlo consultarlo en otro momento. La posibilidad de subir hasta cierto nivel mientras descansas en una posada, haciendo uso de experiencia acumulada, es útil para aquellos que no gustan de tener que luchar y luchar para subir de nivel a sus personajes. En este, y varios sentidos, diríamos que se ha simplificado la experiencia, pero aún hay mucho camino que recorrer y, por supuesto, vas a encontrar retos en un viaje… que vamos a tratar de no estropear, por nuestra parte. Te hemos contado más que suficiente, ¿no crees?
Solo una cosa más; Xenoblade Chronicles 2 en modo portátil es una gozada. De nuevo, comparando con los anteriores títulos, donde el tamaño del texto podía suponer un problema para disfrutarlo en una pantalla pequeña (en el caso de Xenoblade Chronicles 3D para New 3DS o Xenoblade Chronicles X, donde tenías que acostumbrarte a un tamaño de fuente minúsculo cuando jugabas en el GamePad), la versión portátil de este titánico RPG ha sido concebida de tal forma que no notarás el cambio de una forma de jugar a la otra. Es cierto que la resolución puede ser menor, y contar con algunos detalles menos vistosos, mientras que el tamaño del texto es perfecto para ser leído sin ningún tipo de problema en la pantalla de Nintendo Switch. Simplemente es alucinante poder llevarte el juego a cualquier parte… pese a que sea bastante irreal lo que vemos en el anuncio americano de este RPG; jugar en el exterior en un día medianamente soleado puede llegar a ser imposible. Por lo demás, lo dicho, una gozada.
Y hasta aquí podemos llegar. Nos hemos ahorrado hablaros de historia y de infinidad de detalles que nos encantaría que descubrieras por ti mismo. ¿Nuestro consejo? NO VEAS NINGÚN TRÁILER. Tampoco leas la información de la web oficial, o la que comparte tan alegremente la cuenta nipona de este videojuego, y mucho menos la Xenoblade Chronicles 2 Direct. Aunque los detalles revelados por estas fuentes oficiales puedan ser un mínimo de lo que encontrarás en este videojuego, vas a disfrutar un millón de veces más si descubres tú mismo cada uno de ellos por tu propio avance a través de Alrest. Por nuestra parte, aún nos queda mucho que ver, ¡no estamos ni en el ecuador de la aventura!, y no veas lo que estamos disfrutando… Nuestra misión es completar Xenoblade Chronicles 2 para ofreceros el mejor análisis posible, ¡así que permaneced atentos!
Debe estar conectado para enviar un comentario.